Nicolás Dapero ganó una gran carrera del TC 2000 en San Luis, con el Renault Fluence del Ambrogio Racing, tras heredar la punta por los problemas en el Citroen de Ciarrocchi.
Marcelo Ciarrocchi (Citroen) largaba desde la pole la final de la décima fecha de la temporada del TC 2000 en el Autódromo Rosendo Hernández de la provincia de San Luis y se mantuvo en el mando hasta que su auto dijo basta y allí se dio el desenlace más importante de la carrera.
En la séptima vuelta Nicolás Dapero (Renault Fluence) comenzó a recortar distancias con el Citroen del piloto de Almafuerte hasta mostrarle sus intenciones, poniéndose a la par y dejando marcas amarillas sobre el rojo del paragolpes trasero de Ciarrocchi, pero los intentos verían sus frutos recién en la décima vuelta, cuando un problema con la masa de la rueda izquierda del C4 Lounge le hizo perder el control a Ciarrocchi, que luego de su paso por la tierra, hizo su ingreso a boxes perdiendo mucho terreno, dejándole la punta de la carrera a Dapero y del campeonato a Martín Chialvo.
Con la mitad de las vueltas cumplidas, Dapero, Palazzo y Rodrigo Lugón (Fluence) formaban parte del trío de punta manteniéndose con respetuosas distancias entre sí, pero con Mariano Pernía (Renault Fluence) en la cuarta posición, hambriento de puntos para acercarse a la cima del torneo.
A cinco vueltas para el final, Lugón mostró señales de inconvenientes en su goma trasera derecha y su compañero, el «Galgo» Pernía se vio beneficiado escalando hasta el tercer lugar para sumar valiosos puntos, al mismo tiempo que Marcelo Ciarrocchi abandonaba la competencia.
Fue una holgada victoria del auto número 16 de Nicolás Dapero por más de diez segundos de diferencia con respecto a Hernán Palazzo. Mariano Pernía cerró en el tercer escalón del podio.
La próxima cita del TC 2000 será la penúltima y tendrá como escenario al autódromo de Rosario, el 18 de noviembre.
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