El piloto de 23 años, que forma parte del programa de competición de General Motors, tiene como primer objetivo conseguir la Superlicencia.
La confirmación de Cadillac como el 11° equipo de la Fórmula 1 a partir de 2026 no solo sacudió al mundo del automovilismo, sino que encendió la ilusión de los fanáticos argentinos. Nicolás Varrone, piloto oficial de General Motors y campeón 2023 de la categoría LMGTE Am del Campeonato Mundial FIA de Resistencia, surge como un posible candidato para representar a la marca estadounidense en la máxima categoría. Al menos ese el sueño que hizo público el piloto de 23 años…
Varrone se ha consolidado como una de las promesas más destacadas del automovilismo argentino. Su desempeño en competencias como las 24 Horas de Le Mans, donde ganó en 2023 con un Chevrolet Corvette y en 2024 con un LMP2, y su trayectoria en otras carreras de larga duración lo posicionan como un piloto versátil, experimentado y con el respaldo de GM.
Según su manager, José Manuel Balbiani, el plan inmediato es colocar a Varrone en categorías que le permitan sumar los puntos necesarios para obtener la Superlicencia, un requisito indispensable para competir en la F1. Entre las opciones están la Fórmula 2 y la IndyCar, donde General Motors también participa con motores Chevrolet.
«Estamos enfocados en crear una plataforma para que Nico sume los puntos de la Superlicencia. Con Cadillac entrando en la Fórmula 1, sus posibilidades son reales, pero primero debemos garantizar que esté preparado en 2025 para dar el salto», le comentó Balbiani a Infobae.
La estrategia contempla mantener a Varrone en el radar de GM con su participación en campeonatos de resistencia como la Asia Le Mans Series y la European Le Mans Series, donde el continuará desarrollándose como parte del programa de General Motors.
El fenómeno Franco Colapinto, quien abrió la puerta para que Argentina vuelva a tener presencia en la Fórmula 1 después de más de 40 años, es una inspiración clave para Varrone y su equipo. «Lo que lograron Franco y su equipo demuestra que es posible. Vamos a tratar de aprovechar ese camino que abrió y llevarlo al siguiente nivel», aseguró Balbiani.
Colapinto ha demostrado que el respaldo de sponsors y un plan claro pueden superar las barreras económicas que históricamente han limitado a los pilotos argentinos en el automovilismo internacional. Para Varrone, la experiencia en el Mundial de Resistencia y su rol como piloto oficial de Cadillac lo posicionan con ventajas estratégicas frente a otros candidatos.