Los cambios, aunque menores, mejoran la carga aerodinámica y otorgan más libertad a los diseñadores.
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha dado un paso más en el desarrollo de los autos de Fórmula 1 para 2026, anunciando algunos ajustes menores en el reglamento técnico que afectan directamente al diseño aerodinámico y la carga del monoplaza.
Después de la presentación inicial de los nuevos coches hace seis meses, la FIA ha revisado sus primeras propuestas debido a preocupaciones sobre el rendimiento de los monoplazas en las curvas. Con los nuevos ajustes, se espera que los coches de la F1 en 2026 sean más rápidos y competitivos, aunque ligeramente más lentos que los vehículos actuales.
Uno de los principales cambios es la mejora en la carga aerodinámica de los coches. Nikolas Tombazis, director del departamento técnico de la FIA, explicó que la nueva configuración de los monoplazas de Fórmula 1 ha incrementado la carga aerodinámica en unos 50 puntos, lo que reduce la diferencia en rendimiento entre los nuevos coches y los modelos actuales.
Uno de los puntos que más entusiasma a los equipos es la mayor libertad que tendrán los diseñadores para crear soluciones aerodinámicas personalizadas. Esto puede dar lugar a estrategias de diseño innovadoras que ayuden a mejorar la competitividad de cada equipo.
Con estos ajustes, la FIA espera que los monoplazas de 2026 sean más competitivos, sin sacrificar la calidad de las carreras. Aunque serán algo más lentos que los actuales, la mayor carga aerodinámica debería mejorar la capacidad de los monoplazas en las curvas, lo que podría resultar en una mayor estabilidad y mejores luchas en pista.
Estos cambios en el reglamento para 2026 son solo un paso más en la evolución de la Fórmula 1 hacia coches más rápidos, más eficientes y más competitivos, pero también reflejan un intento de garantizar que las carreras sean más emocionantes y desafiantes tanto para los pilotos como para los ingenieros.