La crisis derivada por el brote de COVID19 estalló la misma semana que el Mundial de MotoGP debía iniciarse en Qatar, el pasado 8 de marzo. Todos los equipos de la categoría reina tenían las motos y el material en el circuito de Losail, ya que la semana anterior se habían celebrado los últimos test de pretemporada.
Moto2 y Moto3 estaba, igualmente, al completo en el país tras celebrar allí los últimos ensayos, y de hecho el campeonato arrancó con las categorías menores ese fin de semana.
Todo el material de los equipos y la organización quedó almacenado en Qatar bajo custodia, donde ha permanecido hasta ahora que ha sido ‘rescatado’ para guardarlo en unas naves cercanas a Lleida.
Inicialmente, se mantuvo el protocolo habitual al finalizar el GP de Qatar, asegurando que todo el material se pusiera en cajas, listo para volar a su próximo destino, que inicialmente era Tailandia y después se cambió a Austin, antes de suspenderse el campeonato momentáneamente.
Pero las circunstancias obligaron a que quedara almacenado en el aeropuerto de Doha a la espera de más actualizaciones. Gracias a Qatar Airways, socio de MotoGP, se proporcionó un espacio altamente seguro, automatizado y climatizado para la carga en el Aeropuerto Internacional de Hamad, crucial para gran parte del material, ya que estaba protegido de la humedad y de cualquier cambio en la temperatura ambiente, manteniéndolo seguro y protegido, según ha informado Dorna este miércoles por medio de un comunicado.
Con los vuelos que repatriaban material de Doha a España en una demanda extremadamente alta, Dorna Sports trabajó con Qatar Airways para asegurar los cinco vuelos de carga necesarios para repatriar todo el material.
El primer avión pudo devolver parte de la carga el 1 de abril, seguido por el segundo y el tercero los días 8 y 10 de abril, respectivamente, todos con destino a Zaragoza. Un vuelo a Barcelona el 12 de abril completó el cuarto envío, antes de que el vuelo final aterrizara de nuevo en Zaragoza este miércoles 22 de abril para completar la repatriación.
Una vez que cada carga de material regresaba a Europa, se transfería a unas instalaciones de almacenamiento seguras, en las inmediaciones de Lleida.
La mayor parte del material se mantendrá almacenado a la espera del próximo gran premio, incluido gran parte del equipo de Dorna, mientras que otra parte se devolverá a aquellos equipos o empresas que han solicitado que se transfiera a sus propias instalaciones para su almacenamiento.
Una vez que se confirme la fecha y la ubicación del próximo gran premio, Dorna Sports y su socio de logística DHL reanudarán el servicio normal.
