El circuito de Pardubice, en la República Checa, fue el escenario de la primera carrera del Campeonato Mundial de Flat Track. Y allí hubo un argentino: Matías Frey, quien hizo su debut en la especialidad a bordo de una Suzuki RMZ 450 del equipo de Ángel Grau.
El piloto argentino fue escalando en cada una de las mangas, terminando sexto, cuarto y segundo, respectivamente.
Y cuando en la última venía puntero sufrió una caída que le quitó chances de ingresar directo a la final.
En el repechaje frey terminó quinto y quedó fuera de la carrera final.
Lo que viene
El próximo objetivo de Frey y su equipo es la competencia que tendrá lugar en Alemania dentro de dos semanas.