Sin dudas la alarmante situación que se vive en China ante el brote de Coronavirus hace que las acciones de cualquier evento programado para estos meses sea alterado o cancelado de los calendarios ya anunciados por diferentes entes. Cabe recordar que existe en el gran país asiático un anuncio gubernamental que por 90 días no habrá actividades públicas de ningún tipo.
Tras ello, Federación Internacional del Automovilismo (FIA) días atrás emitió un comunicado en donde si bien ha centrado su atención en monitorear la evolución y propagación del virus, en las próximas horas llevará a cabo una reunión con el Grupo de Estrategia de la Fórmula 1, a fin de analizar y resolver el futuro del Gran Premio de China, que está previsto para el 17, 18 y 19 abril.
Dicho encuentro se conformó tras el tajante rechazo de los promotores del GP de Rusia de intercambiar su fecha (27 de septiembre) con la prueba en China, ante lo cual esta competencia estaría en riesgo de concretarse en 2020, provocando con ello una posible cancelación como ocurrió el pasado 1º de febrero con el ePrix de Sanya, que estaba previsto para el 21 de marzo por el certamen de Fórmula E.
Christian Horner, jefe de equipo de Red Bull, manifestó su posición. «La FIA regula, Liberty Media es el promotor. Ambas son responsables por la salud y bienestar de todos, no solo de los pilotos. Estoy seguro que tomarán las medidas correctas; confiamos en su juicio«, expresó.
¿Y el GP de Vietnam?
La expasión del Coronavirus gradualmente por Asia podría generar también que otra de las competencias de la región se vea afectada, como el primer Gran Premio de Vietnam que está programado quince días antes de Shanghai (5 de abril). Si existen riesgos y la epidemia continúa, es factible que la FIA y Liberty Media aplacen la carrera en el circuito callejero de Hanoi.
De darse la situación de no correrse en estas dos pistas, el calendario de F1 tendrá una brecha de poco más de 40 días entre la competencia en Bahrein (22 de marzo) y el retornado GP holandés en Zandoort (3 de mayo).
